Marruecos, cruzando el Estrecho

Pues sí, cambiamos de país y también de continente. Nos vamos a Marruecos, ese lugar al que la gente tiene un poco de reparo ir, pero que en el fondo yo no lo vi tan malo como lo pintan.

Este viaje lo hice con unos compañeros de la Formación profesional y 2 profesores que se apuntaron a venir con nosotros, en calidad de amigos porque ya éramos todos adultos como para llevar profesores cuidándonos. Se hizo como viaje fin de curso.

Íbamos con un amigo de la FP que es de Marruecos, y el itinerario que hicimos fue el siguiente:

Madrid – Tánger-Chef Chaouen – Tetuán-Asilah, en 5 días.

Para comenzar tuvimos un retraso aéreo de 4 horas, pero eso no nos quitó la ilusión, y a mí menos que era mi primer sello en el pasaporte, eso sí que es ilusión,jajaja.

Llegamos a Tánger, y cogimos carretera y manta caminito a Chaouen, dónde nos alojamos en un hotel justo al lado de la casa de nuestro amigo Mohamed, donde conoceríamos a su encantadora familia.

Madrugando, recibimos un formidable desayuno con dulces marroquíes de la madre de nuestro amigo, agradecidos no lo siguiente, nunca en mi vida había probado nada igual.Fuimos al Parque Nacional de Chef Chaouen, siento no recordar el nombre. Subiendo y subiendo y subiendo se llega al puente de Dios, es un mini puente que mirando hacia abajo no ves más q el guarrazo  que te puedes pegar, pero eso sí, las vistas… ¡ESPECTACULARES!

Tras una mañana andando fuimos a casa de Mohamed, dónde nos esperaba su familia con 2 fuentes de CousCous, muy pero que muy rico, primera vez en mi vida que lo pruebo y encima casero y hecho con mucho amor.

Por la tarde paseíto por Chef Chaouen, finalizando la tarde en una tienda de alfombras donde el vendedor nos ofreció té y una cosita de fumar que ya sabréis,jejeje, muy atento el hombre, pero nosotros alucinamos.

Al día siguiente marchamos a hacer una visita a Tetuán y a mojarnos un poquillo el culillo en la playa, la verdad que muy bien y muy bonito.

Y ya al día siguiente volvimos a coger carretera y manta y marchamos a Asshila. En Asilah por casi nos quedamos sin sitio donde dormir, pero un conocido de Mohamed nos alquiló su casa. Allí estuvimos en la playa y viendo la ciudad, que es muy bonita, ya que es una ciudad amurallada y las ciudades así me encantan, la recomiendo muchísimo, creo que es la ciudad que más me gustó.

Y por último…el día que regresábamos fuimos a visitar la Cueva de Hércules en Tánger, una pasada, la verdad sea dicha.

He de decir que todos nos pusimos malos con la tripa, pero no hay nada que el Fortasec no corte,jajajajajajaja.

Al margen de todo…volveré a visitar otras zonas de Marruecos, es un país que me gustó mucho, más de lo que me esperaba. ¡Visitad Marruecos!